Más pensamiento CRITICO, menos riesgos online

La importancia de estar siempre bien informados es fundamental para tomar las mejores decisiones y, más aún, en estos días en que lo totalmente inesperado, el COVID-19, se ha instalado de una u otra forma en nuestras vidas, obligándonos a establecer nuevas formas de relaciones o interacciones, tanto en nuestro entorno laboral como en el personal.

Para algunos sectores, el teletrabajo ha sido una alternativa a los cierres o cese de la actividad, ofreciendo una solución responsable en esta situación.

Para otros, que por ley o por una conducta corresponsable o solidaria, experimentan el encierro, las herramientas digitales también les pueden ayudar a sentirse más interconectados o, al menos, menos aislados del resto del mundo.

Sin embargo, aunque estos datos nos parecen positivos e incluso esperanzadores, no lo son tanto cuando conocemos el contexto en el que aparecen: antes de que estallara esta crisis, los estudios de la Unión Europea sobre ciberseguridad indicaban que el 86% de los europeos se sentían vulnerables al riesgo de convertirse en víctimas de ciberdelitos, tipología que actualmente ya representa el 50% de todos los delitos.

Además, otros peligros como los bulos, las “fake news” o el radicalismo aparecen de forma más espontánea de lo habitual y en grupos que pueden ser considerados de referencia o confianza para las personas. Nos referimos a grupos de amigos o familiares en Whatsapp, o comunidades de vecinos en redes sociales, por mencionar algunos ejemplos.

Esto también significa que estamos expuestos a peligros a un nivel incluso colectivo debido a la rápida difusión de ciertas noticias alarmistas. Los datos facilitados por el Eurobarómetro sobre Fake News y Desinformación online indicaban que sólo un porcentaje muy bajo de la población europea detectaba con certeza algún engaño o falsedad.

FAke news

En este contexto de vulnerabilidad y desde el teletrabajo, contribuimos con el proyecto CRITICAL, cofinanciado por el programa ERASMUS + que tiene como objetivo empoderar a los adultos europeos haciéndoles capaces de adoptar enfoques más críticos sobre la información y noticias que reciben.

Además, la plataforma educativa CRITICAL, basada en metodologías activas de aprendizaje, pretende ser una herramienta innovadora también para los educadores de adultos, para que ayuden a sus alumnos a identificar y afrontar los desafíos y peligros de Internet y la información que reciben en su vida diaria.

Esperamos poder aportar a este gran desafío y, si te parece interesante, no olvides seguirnos también en nuestras redes sociales.